Ellos qué saben del vacío que se siente, ver que todo va cambiando excepto tu presente, de pasar horas esperando en un rincón el mismo en el que después siempre lloras. Ellos qué saben de aguantar burlas por ser diferente, de romper sueños por miedo de que hablen ver que no tienes apoyo porque no te recuerda nadie, que tu corazón roto solo necesita que lo abracen. Ver como te enfrías y te cuesta sonreír aunque finges que todo va bien siempre y cuando puedas mentir, y van pasando los días pero sigue sin haber nadie a quien le importe qué ha sido de ti.
Pasan los meses mientras eres consciente de que no existes ¿Tus días? No son tristes ni felices y es que cuando llegas al jodido punto en el que ya ni sientes y el pasado solo duele por recordarte lo que un día fuiste.
Qué sabrán ellos si apenas saben tu nombre, qué sabrán ellos de si tus noches se hacen largas, qué sabrán ellos de todo lo que has perdido...
Y es que tu sonrisa vale más de lo que tengan, no te caigas, tú sigue adelante, no des si no dan porque al final todos te quitan. Así que grita, no te calles nunca, que llorar no te hace débil, el verdadero débil aquí es quien te critica, recuerda que no hace falta nadie para cumplir cada meta, y menos a un imbécil que te ponga barreras.
Si soñar te hace libre sueña, sueña siempre que quieras, despliega bien tus alas y nunca más te creas una mentira vestida de promesa.
Recuerda levantar la cabeza para verlo todo mejor; la frente como el dedo corazón, cuanto más alto mucho mejor, que con la cabeza gacha lo único que verás serán piedras, dale color a la tristeza y que se jodan las estrellas, te envidien porque tu sonrisa ilumina más que todas ellas juntas.
Y lo más importante: no te rindas, mantente siempre fiel a tus ideas.
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