Nos ponemos el cinturón, el casco, vamos por lugares iluminados... intentamos salvarnos, ponernos a salvo, pero eso no sirve de nada, cuando viene una desgracia viene sin avisar, sin previo aviso, y no podemos hacer nada por cambiarlo pero olvidamos que, a veces, las alegrías también vienen así.

“Supongo que debo decir lo que he aprendido, mi conclusión. Mi conclusión es que el odio es un lastre. La vida es demasiado corta para estar siempre cabreado. No vale la pena. Dereck dice que siempre viene bien acabar un trabajo con una cita, dice que siempre hay alguien que lo ha hecho mejor que tu, que si no puedes superarlo róbaselo y aprovéchate. Así que he escogido algo que creo que le gustará: No somos enemigos sino amigos, no debemos ser enemigos. Si bien la pasión puede tensar nuestros lazos de afecto, jamás debes romperlos. Las místicas cuerdas del recuerdo resonarán cuando vuelva a sentir el tacto del buen ángel que llevamos dentro.” -America history x-

Deja el pasado en su sitio

El pasado se construye por cosas que ya tuvieron su tiempo y se agotó, cosas que nos hicieron felices, infelices, que nos hicieron crecer como personas, madurar, desconfiados, cosas que nos hicieron daño... pero al fin y al cabo, cosas que nos hicieron más fuertes. El pasado está bien donde está, por más que lo desees nunca va a volver, su tiempo ya acabó y lo único que tarda más es caer en el poder del tiempo son los recuerdos, los recuerdos son como instantáneas máquinas del tiempo que por unos segundos nos permiten revivir viejos momentos, viejos sentimientos... pero muchas veces esa "maquina" que son los recuerdos es un arma de doble filo, sí, nos trasladan a otros momentos, otros sentimientos... pero hay veces que acabamos enamorandonos de esos recuerdos, perdiendo lo que tenemos por lo que un día tuvimos y jamás volveremos a tener. Mi conclusión  es que los recuerdos están bien para saber cómo llegamos a donde estamos, pero no para que vivíamos ahí enfrascados, porque entonces nunca avanzaremos como persona y acabaremos perdidos.